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Las empresas pueden implantar programas de deshabituación tabáquica para sus empleados y los familiares de estos y contribuir así a la mejora de su salud y bienestar al mismo tiempo que se previenen enfermedades como el cáncer de pulmón

Las empresas tienen el compromiso ético de contribuir al estado de salud y bienestar de sus trabajadores, pero también de sus familias y de la comunidad en la que están ubicadas. Esta fue una de las conclusiones extraídas durante la celebración de la European Conference On Tabaco or Health (ECTOH) celebrada en Madrid y organizada por la Asociación Española Contra el Cáncer, junto con el Comité Nacional de Prevención de Tabaquismo y la Association of European Cancer Leagues (ECL). Durante el congreso, enmarcado dentro de la iniciativa ‘Todos Contra el Cáncer’, tuvo lugar una mesa dedicada a empresas saludables en la que se expusieron ejemplos de distintos programas que se pueden implantar en los centros de trabajo para fomentar la prevención, la promoción de la salud y acompañar al trabajador en el proceso de una enfermedad o trastorno de salud.

La mesa estuvo moderada por Helena Morales de Labra, técnico del área de protección social del Departamento de Relaciones Laborales de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y contó con la participación de Dolors Solé, directora técnica del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo; Vicente Gil, director del servicio médico del Grupo Santalucía; y Elia Ginés, del área de Cultura, Compromiso y Experiencia del Empleado del Grupo Santander. Entre los temas que se pusieron sobre la mesa quedó constancia de la importancia de que la empresa esté del lado del trabajador tanto en la prevención de factores de riesgo que reducen su salud como en la promoción de hábitos saludables que la favorecen. Por ello, se dieron a conocer las experiencias de los programas de deshabituación tabáquica aplicados en las empresas participantes en la mesa.

En el caso de Grupo Santalucía, han creado desde su servicio médico, en colaboración con la Asociación Española contra el Cáncer, un programa innovador para ayudar a los trabajadores a dejar de fumar que consiste en la creación de grupos de ocho personas como máximo con los que hacen sesiones online en las que intervienen el servicio médico de la empresa y un psicólogo de la Asociación. De momento la experiencia ha sido positiva: se ha conseguido que un 10% de los empleados consiga abandonar este hábito. Su intención es extenderlo a los familiares que puedan necesitarlo. Desde el servicio médico se considera que con programas de este tipo en los que se cuida de la salud del personal que forma parte de la empresa, el trabajador se siente más feliz, cuidado y escuchado, además de que es más productivo.

Por su parte, Grupo Santander ha desarrollado el programa llamado “Tu pulmón es lo primero” basado en tres ejes. En primer lugar, el del diagnóstico precoz del cáncer de pulmón por el que facilitan a los trabajadores y familiares que cumplan con una serie de criterios de riesgo la realización de una prueba no invasiva para detectarlo de forma temprana. El segundo eje es el de la deshabituación tabáquica que realizan en colaboración con la Asociación Española Contra el Cáncer. Primero celebran unas sesiones de concienciación en las que explican cómo el tabaco hace adictas a las personas, los distintos sustitutivos que hay y la utilidad de la aplicación Respirar como herramienta para dejar de fumar. Además, a través del servicio médico ofrecen apoyo a los empleados que quieran dejar de fumar y activan así un protocolo de acompañamiento en todo el proceso, hasta el final, el cual se estima en torno al año después de iniciarse. El tercer eje es el de los espacios sin humo por el que han reducido a una las zonas establecidas para fumar en los distintos edificios de oficinas de la compañía y aumentando los espacios libres de humo. Lo van a hacer en dos fases para reducir el impacto negativo que puede tener en los trabajadores fumadores y relacionándolo con el compromiso de la compañía con el medio ambiente. En un futuro la idea es que aquellos que quieran fumar tengan que salir de las instalaciones para hacerlo. En total han conseguido que 12 personas dejen de fumar.

Queda así demostrado que desde la empresa se pueden impulsar muchas iniciativas en favor de la salud y el bienestar del empleado y que las organizaciones juegan un papel muy importante, no solo para mejorar el estado de sus trabajadores, sino de toda la sociedad en su conjunto. Por ello, desde ‘Todos Contra el Cáncer’ se busca su implicación en la iniciativa de manera que se trabaje en favor de la prevención, divulgación, atención y tratamiento del cáncer.